Thursday, January 05, 2006

GRADO UNDECIMO LAS MASCARAS O LA DUALIDAD


FIG. 11-1

El ser humano vive sometido al conflicto de los opuestos o juego de las dualidades, cosa que le ocasiona permanente conflicto y sufrimiento. Es la lucha permanente entre la alegría y la pena, el placer y el dolor, lo atractivo y lo repulsivo, el amor y el odio (Ver Fig. 11-1). Durante ese tiempo el individuo se halla desestabilizado interiormente y es presa de emociones negativas.

La calma se recobra al lograr la síntesis o equilibrio de los opuestos, trascendiendo las dualidades al lograr la UNIDAD. Cesa la agitación debido a que se logra la comprensión primero por obra de la voluntad y luego desde un estado de conciencia más elevado. Sin embargo debe subrayarse que la UNIDAD no es propiamente un resultado del esfuerzo sino un DON DE LO ALTO. Este sin embargo requiere un arduo trabajo preparatorio. Sería tonto pensar que las altas metas espirituales pueden alcanzarse con solo unos pocos minutos diarios de esfuerzo. La clave de tal trabajo preparatorio es siempre LA MEDITACION junto a disciplinas complementarias como ser Mantras. Todo lo demás llega a ser secundario cuando no superfluo o absurdo.

La individualidad (o aspecto superior de nuestra naturaleza humana) se debe afirmar en detrimento de la personalidad (aspecto externo e inferior de nuestra naturaleza). Las emociones deben ser controladas (Fig. 11-2).