Monday, February 13, 2006

GRADO TRIGESIMO PRIMERO; EL ANGEL


El ángel simboliza tanto la ayuda de Díos que desciende sobre nosotros como al hombre que se eleva impulsado por sus aspiraciones espirituales.

Con el ángel se completa un ciclo formado además por el águila, el toro y el león alado. A esto se le denomina un tetramorfo (ya mencionado en el Grado Duodecimo), y se conserva hoy, en el simbolismo de las órdenes iniciáticas, a veces unificando todo en una sola figura. Un ejemplo común de un tetramorfo unificado de esta manera lo constituye la esfinge, con cabeza de hombre, alas de águila, garras de león y cuerpo de toro. Vale la pena ahora, al completar el ciclo mencionado, describir con algún detalle este importante simbolismo.

Debe mencionarse, por ejemplo, que el tetramorfo tiene relación con la sagrada Tetractys de los pitagóricos.

Esto es evidente pues existe una correspondencia entre los elementos de una y otra forma simbólica que es la siguíente:

El hombre o el ángel corresponde al espíritu creador, representado por el uno.
El toro corresponde a la materia y por extensión al reino de las dualidades (simbolizado por el dos).
El águila a la unión del espíritu y la materia, síntesis de los opuestos y resolución de las dualidades en un nivel más alto (representado por el tres).
El león a la forma manifestada (representada por el cuatro).

En síntesis, y sin detenernos aquí en otros temas de interés (Vgr. las correspondencias astrológicas del tetramorfo), digamos que este guarda estrecha relación con el precepto rigurosamente observado por los Iniciados en todos los tiempos y lugares:

SABER, QUERER, OSAR, CALLAR

El hombre sabe por su inteligencia, debe querer con su voluntad (León), debe osar con valor y audacia (águila) y permanecer silencioso con fuerza (toro).

En el símbolo que nos ocupa hay un detalle de gran importancia que debe ser mencionado. El ángel trae un mensaje, una Buena Nueva, anunciando el hecho maravilloso que pronto ha de tener lugar.

Siempre el ángel simboliza lo que viene de lo Alto, de lo Invisible, la Gracia de Dios. La Obra al Blanco (albedo) alquímica ya está completada. Se anuncia así la tercera y última etapa de la Gran Obra Interior.